Nacida y criada en Moscú, Tatiana Brodatch se gradúa en el Instituto de Arquitectura y trabaja como arquitecta durante 15 años, entre Moscú y Milán, contribuyendo en la realización de edificios premiados, publicados en varias revistas. del campo. Aunque todavía muy apasionada por su trabajo, pero buscando una forma más directa e inmediata de expresarse, a partir de 2013 se embarca en un viaje artístico. La espontaneidad encuentra el alivio perfecto en la Plastilina, un material adaptable que no se agarrota, con el que Tatiana crea personajes sin rostro, portadores de sentimientos universales: se narra la relación con el Otro, las reflexiones personales, las dudas y vacilaciones propias de la naturaleza humana. del artista a través de esculturas, fotografías y videos. Desde 2015, Tatiana vive y trabaja en su estudio en Milán.